La pequeña Alexandra, sin
haber nacido todavía, lleva encima la experiencia (aunque no la consciencia) de
haber cogido ocho aviones. Unas 24 horas que se ha pasado de su cortita vida
prematura surcando los cielos.
Como podéis imaginar, de
las primeras cosas de las que me informé nada más saber que estaba embarazada
era de las posibilidades y riesgos de volar estando en estado de buena
esperanza.
Los primeros tres vuelos que
hice embarazada ni lo sabía y, evidentemente, no pasó nada pero en cuanto te
enteras piensas que en el cielo el bebé se va despresurizar y se va a quedar
igual que tu botella de agua de plástico, que queda totalmente arrugada y casi
sin aire.
Pero no. Si el embarazo
transcurre sin ningún problema se puede volar durante todo el período de
gestación. Aunque las compañías aéreas a partir de la semana 28 te
obligan a llevar una carta donde tu ginecolog@ indique que eres apta para
volar. El modelo es fácilmente descargable desde las condiciones generales de
cada compañía y en teoría debes presentarlo a la hora de facturar y en la
puerta de embarque. Yo en mi último vuelo lo llevaba pero nadie me lo pidió.
Así que se queda para el recuerdo con los papeles del embarazo. Aunque si no
llevas encima el “apto” la compañía se reserva todos los derechos a no
admitirte en el vuelo.
A partir de la semana 36,
por el posible riesgo que existe de que te pongas de parto mientras estas
volando, directamente ya no te dejan volar. En el caso de gemelos o más es a
partir de la semana 32.
En general se recomienda
volar mejor en el segundo trimestre (semanas 14 a 27) pero es más por tu comodidad.
Debido a que te encuentras mejor y más segura. En los vuelos que hice en el
primer trimestre visité un montón de veces el lavabo, iba con bastante miedo y
no paré de comer (ya que en el primer trimestre siempre tenía mucha hambre y si
no comía me encontraba fatal). Como el embarazo no es evidente a simple vista
cuando pedía a la gente si me podían coger la maleta me miraban con cara rara. En
cambio en el segundo trimestre la seguridad que sientes es mucho mayor y eso se
traduce en mayor bienestar.
Como varias veces me ha
tocado viajar sola, mi técnica era esperarme sentadita a que todo el mundo
embarcase para entrar yo en el avión y ahorrarme toda la cola de pie. Entonces
escogía un asiento (de los que quedaban) del pasillo, ya que normalmente la
gente prefiere ventanilla y para mí pasillo era perfecto para poder ir
moviéndote sin molestar a nadie. Y con un buen surtido de comida y lectura es
cuestión de ir pasando las horas de vuelo lo máximo relajada posible.
En internet hay mucha
información sobre el tema. Como siempre la página de Baby Center aporta
información muy completa al respecto.
cuando era niña me dijeron q si nacías en un avión tenías pasajes gratis para toda la vida. en una época en que no existían las aerolíneas low cost era mi sueño dorado! XD
ResponderEliminar¡hahaha! ¡Esa es buena!
EliminarA mi también me dijeron eso jeje Justo lo comenté con una amiga el otro día... que bueno! por lo visto es algo que se iba diciendo :) tal vez era verdad...
EliminarYo también volé un par de veces estando embarazada de 5 meses. Y también lo consulté. Las madres nos volvemos muy precavidas cuando lo somos jajaja
ResponderEliminarBuenos consejos.
Un beso.
¡Sí! Y hoy en día con internet tienes todas las respuestas al alcance de la mano... quizás demasiadas! ,)
EliminarUn beso,
Yo fui a México embarazada de 6 y volvi de 7 meses y ohmaigot ahi si me dolió todooooo :P No encontraba posición cómoda y levantarme al baño 17 veces era bastante molesto.... ¡NO QUEDA NADAAA YUJU! un besote desmadroso
ResponderEliminar¡Ostras! Tan gordita y tantas horas de viaje ¡qué tortura!
EliminarPero al final todo se supera, oye!
Un beso y gracias,
Yo no he volado nada embarazada, ya que la única oportunidad la hubiese tenido durante este verano y como ya estaba de 28 semanas preferí ir en tren ¡para poder bajarme si me ponía de parto! Cosa que afortunadamente no sucedió. Eso sí, en el viaje de vuelta, y mira que el AVE es cómodo, no encontraba ninguna postura cómoda.
ResponderEliminar¡Puff! Es como ir en coche, al final ya no sabes cómo colocarte...
Eliminar¡¡Lo que hay que hacer en esta vida moderna!!
Un bso,
Sí que ha viajado la peque
ResponderEliminarYa me gustaría que no hubiese sido tanto...
EliminarQue barrigota tienes ya!! puff que poquitito te queda para verle la carita a Alex!! jijij.
ResponderEliminarAhora seguro que si vas en avión, tren... te ayudan sin problemas, jiji. Es lo que tiene que el embarazo sea "visible" para otros.
Ánimo que ya no te queda nada.
Besotes!!
¡Muchas gracias!
EliminarAhora la verdad es que procuro ni tener que coger el coche pq con la barriga tan gorda todo se hace súper incómodo..
Un beso guapa,
Algo había oído pero todavía no sabía nada de este tema. Ya estas en la semana 34, ay madre no te queda nada para verle la carita. Beso grande!!!
ResponderEliminar¡Ya ves! Si es que al final todo llega... ¡Aish!
EliminarUn beso,
Ups! Pensaba que ya había comentado este post! >.<
ResponderEliminarTu me encantas, tu barriga me encanta, la peque/gordi/beba/Alex me encanta... Y odio los aviones porque os llevan lejos de mí T.T'
No sabía que se podía querer a alguien sin conocerlo ni haberlo visto, ahora se que si, supongo que esto es como la fe, todo es cuestión de creer y querer!
Besotes gordos gordos como tu barriga!
Bueno, los aviones nos llevan lejos de ti pero también nos acercan ,)
EliminarBesos guapa,
Hola Amiga, ya sabes que últimamente el tiempo es loq ue me fala y comento en desorden cronólogico. Me ha gustado mcho leerte y la verdad es que siempre me pregunte esta cosas acerca de viajar embarazada, a mí me dio mucho miedo y decidí no viajar. Me alegra que tú sí tengas valor para hacerlo y bueno... ya n te queda nada! ¡El próximo vuelo será con Aleandra! ya nos contarás :D
ResponderEliminarAbrazos desde Budapest